¿Qué son los efectos del entrenamiento? ¿Qué sucede con tu cuerpo cuando adoptas el hábito de entrenar?
Cuando leemos éstas palabras «los efectos del entrenamiento«, puede ser que se nos venga a la mente la idea de un mejor cuerpo, nalgas apretaditas y paraditas, un abdomen plano o marcado. En fin, un cambio físico muy bien notorio.
Pero más allá de la transformación física que puedes desarrollar, están aquellos cambios que son imperceptibles ante nuestros ojos. Cambios que, una vez empiezas a notarlos les comienzas a dar más valor en comparación a lo que logras ver.
¿Sabías que una vez que empiezas a entrenar y mantienes éste hábito en el tiempo, tu cuerpo comienza a cambiar a nivel celular?
¿Y qué significa ésto?
Pues que en tu vida va a haber un impacto a nivel corporal en donde las funciones de tu cuerpo se van a ver mejoradas. O sea, un cambio desde lo micro a lo macro.
Aquí comienza a importarte más cómo te sientes en lugar de cómo te ves.
Es decir, una vez que empiezas a practicar ejercicio físico todo cambia en ti. Sólo que la mayoría de las veces no logramos ver dichos cambios porque son casi imperceptibles cuando no sabemos escucharnos.
- Uno de los tantos cambios es que la función mental mejora, así como tu autonomía y la memoria. Podrás aprender mejor y aumentar tu nivel de concentración.
- Otro beneficio que podrás notar es que tus huesos y músculos se van fortaleciendo. Podrás realizar movimientos sencillos que antes se te dificultaban como por ejemplo: Agacharte a ponerte los zapatos.
- La función de tu corazón también mejora, ya que tu frecuencia cardíaca en reposo disminuye, al igual que la presión arterial.
- Y por si no es suficiente, la composición corporal también cambia. ¿A qué me refiero con ésto? Pues que con el tiempo comienzas a notar como aumenta tu porcentaje de masa muscular, mientras que el porcentaje graso disminuye. (Eso sí, dependiendo del entrenamiento que realices, la frecuencia y la intensidad)
Además, algo que es de suma importancia y que muchas veces pasamos por alto es que nuestra coordinación y equilibrio también merecen ser atendidos, ya que con el tiempo, las funciones cognitivas van disminuyendo, y a la falta de ejercicio este proceso se acelera.
- Por lo tanto, otros de los efectos del entrenamiento es que los movimientos rutinarios se vuelven más eficientes.
Eventualmente con el tiempo tu coordinación y equilibrio mejoran si eres disciplinado y constante con tu entrenamiento.
¿Cuáles serían las consecuencias a la falta de ejercicios?
Cuando no estamos acostumbrados a realizar ningún tipo de actividad física o deporte que nos permita mantenernos activos y llenos de energía, el cuerpo reacciona.
El cuerpo humano es tan sabio que es como si dijera «bueno, si no utilizan ésta parte de mí es porque no la necesitan. Vamos a prescindir de ella»
Es aquí cuando comienzas a perder masa ósea, masa muscular, y las funciones que son básicas del día a día como caminar o sentarte comienzan a ser un problema porque requieren de un esfuerzo extra de tu parte para poder realizarlas.
Lo mismo pasa si somos personas acostumbradas a practicar algún deporte y de pronto dejamos de ejercitar por varios meses, o incluso años.
El cuerpo siempre responde a los estímulos, o en éste caso, a la falta de éste….
Para que me entiendas un poco sobre la importancia del entrenamiento, y la necesidad de moverse. La OMS declaró en el 2013 que el sedentarismo se encuentra dentro de los 4 factores de mayor riesgo de muerte. Ya que ésta aumenta entre un 20% y un 30% en personas que son inactivas :=0
Eso es un dato preocupante pero al que pocos le prestan atención.
Pasar mucho tiempo inactivo es, a la larga, tan perjudicial para tu salud como fumar…
¿Qué sucede con una persona sedentaria?
Una persona que no practica ningún deporte, o que no hace ejercicios, o algún tipo de actividad física, tiende a aumentar de peso corporal pudiendo terminar en obesidad. Y la obesidad es una de las enfermedades que desencadena problemas cardíacos y trastornos metabólicos poniendo así en riesgo la salud de quién lo padece.
La falta de ejercicio físico o de un entrenamiento apropiado para mantener la vitalidad, termina volviéndonos personas sedentarias, perdiendo así nuestras capacidades físicas y funcionales con el pasar del tiempo. Por ejemplo:
- La elasticidad del cuerpo disminuye, asi como también la falta de movilidad.
- Quemas menos calorías, lo que te hace propenso a subir de peso con mayor facilidad.
- Pierdes masa muscular porque no usas los músculos como deberías.
- Tu resistencia para las actividades cotidianas disminuyen significativamente.
- Los huesos se debilitan.
- El metabolismo se vuelve lento por lo que será más difícil para éste sintetizar grasas y azúcares.
- Tiendes a inflamarte con mayor frecuencia.
- Y también a desarrollar un desequilibrio hormonal.
- El sistema inmune también se debilita, lo que te deja propenso a enfermarte fácilmente.
- Además, la circulación sanguínea se vuelve ineficiente.
Cómo puedes darte cuenta, la falta de actividad física puede desencadenar muchos problemas a largo plazo.
Tal vez al principio no lo sientas, o quizá crees que eres muy joven como para que te sucedan éstas cosas. Pero con el pasar de los años la falta de actividad física comienza a pasarte factura.
Por lo tanto, quiero ayudarte a ver los efectos del entrenamiento no desde un punto de vista estético, sino de salud. Porque si lo piensas bien, cualquiera puede verse bien pagando un buen cirujano estético. Solo es cuestión de pedir que te pongan nalgas, o que te quiten grasa de aquí y allá. Pero no cualquiera es capaz de sentirse bien de adentro hacia afuera.
La salud no se puede comprar, pero si la puedes crear.
Los Efectos del entrenamiento en el cuerpo
Cuando adoptas el hábito de hacer ejercicios, éste impacta enormemente en tu cuerpo de tal manera que aumenta su capacidad funcional. Es decir:
- Mejora la función de tu corazón.
- Los huesos, músculos y tejidos se fortalecen
- Liberas más energía con menos esfuerzo
- La frecuencia cardiaca en reposo disminuye al igual que la presión arterial
- Desarrollas mejor coordinación y tus movimientos se vuelven más eficientes
- Tu composición corporal cambia (disminuye tu masa grasa y aumenta tu masa muscular)
Vamos a ver cada una con más detalle para que entendamos mejor estos efectos del entrenamiento.
1) El ejercicio mejora la función cardiaca
Es bien sabido que los ejercicios aeróbicos como correr, bailar, caminar o montar en bicicleta tienen altos beneficios en cuanto al fortalecimiento del sistema cardiovascular, ya que el componente esencial de éste tipo de entrenamiento es la resistencia. Lo que va a provocar que tu corazón se vaya adaptando poco a poco al esfuerzo físico.
Los resultados de ésta mejoría producen un mejor estímulo en la circulación sanguínea, aumento en la cantidad de sangre que tu corazón puede bombear sin que necesite gastar más energía para lograrlo. También evita la formación de coagulos dentro de las arterias, y mejora la cantidad de sangre que llega a tus músculos.
En resumen, el ejercicio físico aeróbico fortalece tu corazón.
2) Se libera más energía con menos gasto de oxígeno.
Esto significa que mejorará tu resistencia aeróbica y anaeróbica. ¿Qué quiero decir con ésto?
Bien, para cualquier actividad física que realicemos el cuerpo necesita de oxígeno para poder liberar energía y ejecutar la actividad (cualquiera que ésta sea) que nos hemos dispuesto a lograr, ya sea caminar o realizar un HIIT.
El punto aquí es que, mientras más practiques dicha actividad, tu rendimiento se vuelve mejor y más eficiente debido a que tu cuerpo empieza a adaptarse a ese esfuerzo físico al que lo sometes día con día. Por ejemplo:
Si como principiante eres capaz de realizar 5 burpees y terminas con la lengua afuera casi muertx, al ir practicando este ejercicio constantemente te vuelves cada vez mejor, y con el pasar de las semanas serás capaz de realizar 10 burpees quedando cansada si, pero ya no sintiendote morir.
¿Y eso por que? Por que como principiante tu cuerpo se quedaba sin oxigeno, por lo que era incapaz de lograr una repetición más, quedabas exhausta. Mientras que ahora que ya te has adaptado a ese esfuerzo físico, puedes terminar tus 10 burpees (liberas energía) pero con menos gasto de oxígeno (ya no te quedas sin aire), por lo que bien puedes continuar con otro ejercicio, o realizar mas burpees.
3) Entrenar fortalece tus huesos, tejidos y músculos
El cuerpo es sabio, y sabe que si no utilizas algo, el va a prescindir de ello. Asimismo lo opuesto, si tu más practicas cierta actividad, mejor te vuelves en ello. Desarrollas fuerza, desarrollas resistencia. En fin, mejoras con el pasar del tiempo porque a medida que vas avanzando, tu cuerpo se adapta y evoluciona. Por ejemplo:
Si como principiante levantas un par de mancuernas de 2kg en un press de hombros y logras 10 repeticiones, eventualmente con la práctica irás mejorando porque tu cuerpo capta los estímulos que le proporcionas y éste se irá preparando para rendir mejor a estímulos más retadores.
Al cabo de dos meses ya no levantarás 2 kg sino 5 kg o más, realizando el mismo numero de repeticiones o un poco más.
Y todo ésto porque tus huesos y músculos fueron desarrollando fuerza y se fortalecieron con el pasar de esas 8 semanas.
Le proporcionaste un estímulo a tu cuerpo, y éste respondió a él incrementando su fuerza.
4) La frecuencia cardiaca en reposo disminuye
La frecuencia cardíaca hace referencia al número de pulsaciones o latidos de tu corazón por minuto.
El ritmo cardíaco que mantengamos en reposo va a depender de la características particulares que presentemos como individuos, y en cada persona estos latidos van a ser diferentes.
Para que tengas una idea, el ritmo cardiaco oscila entre los 50 y 100 pulsaciones por minuto en rangos normales.
Algunas investigaciones demuestran que un ritmo cardiaco alto (pulsaciones por encima de lo normal) eleva el riesgo de fallecimiento.
Por lo tanto, he ahí la importancia del deporte como herramienta para reducir las pulsaciones del corazón y mantener una salud optima.
Pero, ¿Por qué una frecuencia cardiaca baja en reposo es sinónimo de salud?
No siempre es el caso (personas con alguna condición médica de por medio pueden presentar pulsaciones mas bajas de lo normal)
Pero si descartas problemas de salud, y eres una persona activa deportivamente, y tu frecuencia cardiaca en reposo está entre 60- 40 latidos por minuto, eso es un indicativo de que tu musculo cardiaco está en una mejor condición y no necesita trabajar tanto para mantener un latido estable.
Lo opuesto sucede con las personas sedentarias, que incluso estando en reposo manejan pulsaciones de entre 70- 78 latidos por minuto, si no es más.
Si no practicas ningún deporte o actividad física que te mantenga activa, te animo a que calcules tus pulsaciones y las anotes en un cuaderno, y luego empieces a practicar ejercicios cardiovasculares. Al cabo de un mes vas a notar la diferencia. Entonces, vuelves a tomar tus pulsaciones y te darás cuenta como los efectos del entrenamiento afectan de manera positiva en la fisiología de tu cuerpo. Entrenar va más allá de la estética.
5) Desarrollas mejor coordinación
Mantener una buena coordinación incrementa las capacidades físicas básicas como: Caminar, agacharte, pararte de puntas a coger algo. En fin, movimientos que realizas en el día día.
Uno de los efectos del entrenamiento es que mejoras tu coordinación y equilibrio con el objetivo de ayudarte a mantener movimientos coordinados y dirigidos de tal forma que el cuerpo pueda actuar de una manera conjunta y asimismo, mantener la correcta ejecución técnica de los ejercicios que están establecidos en tu rutina.
No todo es tener un six pack o unas nalgas redondas.
Eventualmente los años pasan, y más que tener un abdomen plano, es mejor tener un cuerpo fuerte que esté preparado para cualquier eventualidad que se nos cruce en el camino, o estar preparado para la vejez.
Imagina tener que caminar por un sendero donde el camino es sumamente estrecho y no puedes pisar en cualquier lado. Siendo una persona con un buen nivel de coordinación y agilidad porque entrenas para la vida, no tendrás problema para ese desafío.
Pero si eres una persona que hace 0 ejercicios y se te presenta una situación como la anterior, difícilmente sabrás cómo responder a ese desafío, y probablemente termines resbalándote. Y lo que es peor aún, lastimándote.
Es por ello que un buen programa de entrenamiento no sólo va a estar enfocado en ejercicios para mejorar cómo te ves, sino más bien en ejercicios que te ayuden a desarrollar todas tus capacidades físicas y motoras para llevarlas a su máximo potencial y darte una mejor calidad de vida.
Trabajar con ejercicios unilaterales es una excelentísima manera de mejorar tu coordinación y agilidad. No los descartes.
6) Tu composición corporal cambia gracias a los efectos del entrenamiento
¿Qué significa eso de cambiar tu composición corporal?
Perder grasa y ganar músculo.
Bueno, la mayoría de las personas van al gym o empiezan a hacer ejercicios con el objetivo de cambiar la forma en cómo se ven ¿no?
Unos desean perder peso, otros desean aumentar masa muscular, y otros buscan mantenerse. Pero todos con el objetivo de mejorar su cuerpo de alguna manera. Y justamente eso significa cambiar la composición corporal. Cambiar/mejorar la forma en la que tu cuerpo se ve.
Pero cabe recalcar que esto se logra con un programa de entrenamiento bien estructurado porque, cualquier persona puede perder peso. Pero son pocos los que logran perder peso en grasa y construir músculo.
No es lo mismo hacer ejercicios a lo loco sin ninguna guía, a tener armado un plan qué te dice el porqué y para qué de lo qué haces según tus objetivos.
Se trata de entrenar inteligente, con una razón de ser y a consciencia.
Cuando sigues un plan que funciona para ti, los cambios en tu cuerpo (como luces) comienzan a ser notorios. No tanto por el peso, sino en cómo te queda la ropa, en cómo lucen tus piernas y tus brazos. Y ni se diga del cómo te sientes.
Como mencioné anteriormente, el cuerpo es sabio y este responde a los estímulos que tú le proporciones.
Si entrenas día con día, metiéndole ganas, y con la intensidad que se necesita para mejorar, empezarás a sentir y notar los cambios sin duda.
No le temas a entrenar con pesas. Esta científicamente demostrado que el entrenamiento con pesas ayuda a perder grasa y construir músculo. El cardio por si solo te va a ayudar a mejorar la resistencia cardiovascular. Pero no vas a notar muchos cambios en tu composición corporal a menos que levantes pesado y combines con algo de ejercicios aeróbicos.

Los efectos del entrenamiento son cambios que empiezas a notar en ti de adentro hacia afuera cuando eres consistente de que ya no entrenas por un tema físico, sino por salud. Cuando te haces consciente de que hacer ejercicios es un estilo de vida y no una solución de 2 meses para marcar tu abdomen.
Cuando caes en cuenta de que los resultados que quieres ver los vas a obtener con esfuerzo, dedicación y disciplina, el tiempo deja de importarte y solo te centras en dar lo mejor de ti día con día. Ya no piensas en hacer ejercicios por 3 u 8 semanas. Porque reflexionas de que lo que haces, lo haces por salud y por construir una versión más fuerte y mejorada de ti.
Si empiezas a entrenar desde hoy, al cabo de un mes comienzas a sentir los resultados de tu esfuerzo. Al cabo de 3 meses comienzas a notarlos. A los 6 meses ya los sientes parte de ti. A los 9 meses ya no hay nada que te detenga.
Recuerda que para verte bien basta solo un poco de maquillaje, y un par de pinchazos aquí y allá. Y claro, estar haciendo retoques cada cierto tiempo para mantener esa falsa belleza. Pero para sentirte bien de adentro hacia afuera, y que eso se note porque lo irradias, eso es otra cosa. Aquello se construye.
La salud y el bienestar se trabaja y se forja diariamente.
Tu cuerpo y tu yo del futuro van a estar agradecidos contigo cuando llegues a cierta edad en donde la gravedad y los años tienen más peso, y tú, vas a estar preparado.
Espero de todo corazón que ésta lectura te anime a tomar el control de tu vida y empieces a ejercitar desde hoy para cambiar cómo te sientes y como te ves, pero desde el trabajo inteligente.
Recuerda que si empiezas hoy, al cabo de éste año serás una persona totalmente distinta a la que empezó y te sentirás orgulloso de ti por haber tomado las riendas de tu salud.
Si te ha gustado esta lectura, compártela con las personas que amas para que ellos también den el paso hacia un mejor estilo de vida y se beneficien de todos los efectos del entrenamiento ahora vistos.
Y si deseas saber más de mí y cómo manejo mi vida fit, te invito a que compartas conmigo a través de mi cuenta de Instagram donde subo rutinas, tips y recetas para que me funcionan a mi a llevar una vida más sana.
Espero verte por allá. Un abrazo💓
0 comentarios